Muy buenas tardes a todas y todos ustedes.
Como no va a estar a gusto el señor rector, imagínense, en esta hermosa ex capilla del Hospital de los Juaninos, un bello recinto de la universidad y escuchando las notas de la quinta sinfonía y con la dirección de uno de los grandes de la cultura y de la música en nuestro país, el maestro Enrique Bátiz. Muchas gracias, maestro.
Nunca imaginé estar aquí en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo recibiendo las muestras de afecto, de cariño, de parte de todos ustedes, del señor rector Octavio Castillo; de los exrectores aquí presentes, del dirigente de los académicos, de los administrativos, del líder estudiantil, del Consejo Universitario, de la comunidad universitaria.
Es algo que a mí me emociona mucho, estar no nada más en una universidad que, a pesar de que como universidad data de 1961, tendrá escasos 62 años de edad, forma parte de la historia cultural, académica, social y política, no nada más de Hidalgo, sino del país.
Como yo les dije, este hermoso recinto universitario fue hasta 1869 la sede del Hospital de los Juaninos, cuando fue entregada a lo que, en esa época, pues era la semilla de lo que hoy es la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, la quinta, me corrigió el Rector.
Yo tenía el dato de que era la sexta, pero me corrigió para bien, la quinta universidad más importante del país, que entre bachillerato, universidad y posgrado agrupa una matrícula de más de 60 mil estudiantes, pero es una universidad que trasciende las fronteras de la propia universidad y del estado de Hidalgo.
Para nosotros, la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo es un referente de lo que debe de ser, primero, el respeto a la autonomía universitaria y segundo, la vida académica y universitaria de todos estos centros en el país. Es un ejemplo de la buena marcha de una universidad pública.
Como bien dijo el rector y vaya que me tocó conocerlo en momentos difíciles, pero antes yo aquí hago un paréntesis para enviarle un saludo a nuestro amigo, es mi compañero, es un orgullosamente abogado egresado de aquí de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, al señor gobernador, Julio Ramón Menchaca Salazar, desde aquí le envío un saludo con mi afecto, con mi reconocimiento.
Pero, también aprovecho para exhortarlos. Hidalgo se está transformando y toca al gobernador Menchaca, quien fue electo con el apoyo mayoritario, ampliamente mayoritario de ustedes, del pueblo de Hidalgo, ahora toca acompañarlo en esta tarea, desearle el mayor y el mejor de los éxitos y apoyarlo en todo, porque si le va bien al gobernador de Hidalgo, pues le va a ir bien al estado.
Aprovecho este espacio no nada más hermoso, sino esto, porque las universidades también son espacios para la reflexión y para el compromiso social, para hacer un exhorto a todos, al pueblo del estado de Hidalgo, a la sociedad del estado de Hidalgo para acompañar a nuestro amigo, el gobernador de la transformación de Hidalgo, Julio Ramón Menchaca Salazar.
Y aprovecho aquí también para enviar un saludo a alguien a quien no tengo el gusto de conocerlo en persona, hemos platicado por teléfono en una o dos ocasiones, si acaso, pero con quien me tocó, porque es un referente aquí de la Universidad, Gerardo Sosa no puede ser un integrante anónimo de esta comunidad.
Es un referente y yo aquí aprovecho para mandarle un saludo, para desearle que esté bien y para reconocer su trabajo, su aporte a esto que hoy es un ejemplo de autonomía y un ejemplo de buena administración. Miren que, además lo quiero decir aquí abiertamente, porque pues hay hombre cuyos actuar y cuya figura, pues generan tempestades.
Pero más allá de que incluso él y yo pudiésemos tener alguna diferencia política, que no puedo tenerla con alguien con quien no he tenido mayor comunicación, sí me precio de reconocer su acción y se ve, se nota su mano y su actuar aquí en la Universidad, en este ejemplo, que es la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Y también aprovecho aquí para agradecer el apoyo, saludar, felicitar la presencia de nuestras amigas, amigo diputado federal; de Isabel Alfaro, que aquí está presente, muchas gracias; de mi amiga, promotora además de este encuentro con la comunidad, de Lidia García Anaya. Muchas gracias, Lidia y de mi amigo, compañero, Cuauhtémoc Ochoa. Muchas gracias a los tres.
Agradecer también la presencia de los diputados locales, de los exrectores de la universidad, de todos y cada uno de ustedes. Ya el señor rector hizo un pequeño resumen de todo lo que es, de todo lo que significa la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Se dice fácil, pero hoy ya están en cuanto a bachillerato, si no mal recuerdo, son siete los espacios ya de bachillerato. Habló también del número de investigadores, 521, del Sistema Nacional de Investigadores del Conacyt.
Habló de la dinámica del crecimiento de esta universidad, de cómo está prácticamente ya en todas las regiones del estado de Hidalgo, solamente ahora está por abrirse en la región otomí-mazahua, si mal no recuerdo.
Pero ya, tanto en el Mezquital, como el Altiplano, la Sierra Gorda, como en la Sierra Baja, pues ya está presente en la Huasteca también, ya está presente la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Es un ejemplo, se los digo con toda franqueza, es un ejemplo de buena gestión, de buena administración, de compromiso social, la universidad del estado de Hidalgo.
Yo aprovecho aquí para decir y ratificar el compromiso, tenemos que seguir apoyando con todo al sistema de universidades públicas de todo el país, no nada más a la de Hidalgo, a todas las universidades públicas del país, porque es el eje de la formación de más y de mejores mexicanos, de más y de mejores universitarios en nuestro país.
Las universidades públicas de nuestro país, muchas están a la altura de las mejores del mundo, la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo desde luego que no es la excepción. Pero, más allá de la obra material, lo que importa también es el compromiso social de la universidad, de la comunidad y en eso, Hidalgo va a la vanguardia.
Por eso, yo ratifico el que, en un futuro no muy lejano, estemos donde estemos, vamos a seguir apoyando con toda a la universidad, tiene que seguir trascendiendo; tiene que seguir trascendiendo esta gran universidad autónoma.
Hidalgo tiene todo, tiene todo para ir a la vanguardia del país, yo creo, yo no tengo ninguna duda que Hidalgo, que los próximos años, que esta generación serán los años y la generación de Hidalgo y los hidalguenses.
Y estemos donde estemos, yo creo que el Gobierno Federal no va a dejar solo ni a Hidalgo ni a su universidad.
Muchas gracias, de verdad por la oportunidad que me han brindado de estar aquí, de intercambiar algunos comentarios con ustedes, de disfrutar al maestro Enrique Bátiz y a la Orquesta Sinfónica de la Universidad.
Muchas gracias a todas y a todos ustedes.
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