Muy buenos días tengan todas y todos ustedes.
Me da mucho gusto estar aquí en Jilotepec, acompañado de ustedes.
Y quiero, primero pedirles una disculpa, nunca calculamos el tráfico para llegar hasta acá y por eso llegamos con 40 minutos de retraso y yo, quiero decirles que respeto su tiempo, respetó el que ustedes dediquen tiempo para acompañarnos y por eso les quiero pedir una disculpa por el retraso. ¿Si me disculpan? Pues, siendo así, pues con más alegría.
Miren, es en un día como hoy, un día de semana, en una hora laboral es verdaderamente muy gratificante, muy emocionante que ustedes pueden acompañarnos
Normalmente en un día como hoy, en una hora como hoy están ustedes ocupados en otras cosas y el que hayan decidido acompañarnos, verdaderamente representa para nosotros un doble compromiso, estamos más obligados que nunca a cumplirles.
Y yo, aquí quiero iniciar reconociendo al pueblo del Estado de México, en particular a la zona norte del Estado de México, estos 10 municipios del Estado de México y a todo el estado, porque ustedes, en un ejercicio democrático, ejerciendo libremente su voto, han decidido que el Estado de México sea gobernador por una mujer, por Delfina Gómez, va a ser, a partir de septiembre, la gobernadora del Estado de México.
Así como ustedes decidieron apoyarla, ahora creo que es el momento de cerrar filas, de apoyar con todo a quien va a ser una gran gobernadora y desde aquí, yo quiero mandarle un saludo afectuoso, mi reconocimiento y los mejores deseos.
La conozco, es una gente del pueblo, una maestra dedicada a enseñar en los últimos años a la política. Imagínense ustedes que era, hasta antes de ser candidata Secretaria de Educación del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por eso, hay que reconocerlo y hay que ayudarle. El Estado de México enfrenta problemas muy complejos, pero Delfina va a conducir por buen rumbo este barco, va a ser, como les dije, una gran gobernadora y va a tener el apoyo del pueblo del Estado de México y de todos quienes integramos este movimiento, porque si a Delfina le va bien, le va a ir bien al pueblo del Estado de México.
Por eso quisimos iniciar esta jornada aquí en Jilotepec, la región norte, desde luego que es una región, 10 municipios que enfrentan una problemática muy diversa, pero nos identifica algo, que son gente trabajadora, gente esforzada, gente dedicada.
Aquí, la mayor parte de la población se dedican a las tareas del campo, por si no lo saben, aquí en Aculco de Hidalgo, hay de los mejores quesos del mundo, es una cuenca lechera que tenemos que apoyar y tenemos que apoyar a todos los agricultores del Estado de México, pero principalmente a la zona norte del Estado de México.
Eso era antes, solamente volteaban a ver a Jilotepec, porque les necesitaban políticamente. Durante años, los veían nada más como la reserva electoral del gobierno en turno.
Pero ahora ya cambió, por primera vez, en la historia del estado, en una elección para gobernador por primera vez decide el pueblo, por eso aquí en Jilotepec, siete de los 10 municipios ganó Delfina Gómez. Ahora ya deciden ustedes.
Y quiero también hacer un reconocimiento a la participación y a la presencia el día de hoy de los adultos mayores que nos acompañan esta mañana. Muchas gracias.
Ustedes son, en realidad, la esencia de este movimiento. Sin la participación de ustedes durante, cuando menos 20 años, sin el apoyo de ustedes, probablemente Andrés Manuel López Obrador nunca hubiera llevado a la Presidencia de la República. Ustedes lo consiguieron, ustedes lo llevaron a la Presidencia.
Por eso, es para nosotros especial motivo de orgullo que, después de tanto tiempo de luchar al lado del presidente ¿se acuerdan cómo en el 2005 inició la campaña presidencia y siempre, desde el primer día acuñó un lema: “Por el bien de todos, primero los pobres. Por el bien de todos, primero los adultos mayores”.
A mí consta, porque yo lo acompañé en gran parte de su recorrido por el país, en esa época, que siempre comprometió que cuando fuera presidente de la República iba a haber pensión universal para los adultos mayores y esto que les voy a platicar, a muchos les puede sonar conocido.
Resulta que un día en Oaxaca, un agricultor se le acercó y le pidió un consejo. Y le dijo: “Oiga, quiero que me aconseje. Tengo 73 años, mi viejita tiene 71, pero yo ya no puedo trabajar. Tengo mi parcela, pero ya no tengo fuerzas para trabajar la tierra.
“Me dijeron que me podían dar una pensión del Seguro Social, una jubilación y fui al Seguro Social y ahí supe de la triste realidad, que como yo no había trabajado en ninguna empresa, ningún comercio, ni había tenido un patrón, pues no tenía derecho a una jubilación del Seguro Social”.
¿Por qué les digo que les puede sonar conocido? Porque muchos de ustedes han sufrido lo mismo. Ningún agricultor de aquí de Jilotepec y de toda esta región norte del país tiene derecho a una pensión del Seguro Social, ni un herrero, ni un albañil, un peón de albañil, ni un electricista, ni un panadero, ni una ama de casa, ni un obrero, mucho menos un ejidatario, un bolero no tienen derecho a una pensión.
Entonces, el licenciado Andrés Manuel le dijo: “Mira, ten nos paciencia. Voy a ganar la elección. Voy a ser presidente de la República y ahora que sea presidente va a haber pensión para los adultos mayores”.
Nada más que, como siempre, los que se sentían amos y dueños de México, los que creían que mandaban, Televisa y otros. ¿Se acuerdan cómo decían que Andrés Manuel era un peligro para México?
Pues, vino la elección del 2006 y le robaron la Presidencia de la República en el fraude electoral, el mayor de los fraudes electorales de la historia de México y vaya que hubo fraudes electorales durante, cuando menos, 10 elecciones presidenciales. Antes de eso, pero este fue el más escandaloso.
Le robaron la Presidencia e impusieron a un espurio, a Felipe Calderón y entonces había que canalizar el descontento popular. Primero, fue el plantón en el Zócalo y en el Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México. Seguramente muchos de ustedes lo acompañaron y otra vez, Televisa diciendo lo mismo: ya vieron que sí era un peligro para México, con ese plantón va a acabar con todos los comercios de la Ciudad de México.
Pues, ¿saben qué? Este movimiento siempre ha sido pacífico, porque el pueblo de México es pacífico y un movimiento popular en este país tiene que ser pacífico.
Y no se rompió ni un vidrio en ese movimiento y después, a canalizar el descontento popular. ¿Qué hizo Andrés Manuel? Se dedicó a recorrer el país junto con ustedes, plaza por plaza, pueblo por pueblo y otra vez, lo desaparecieron de la pantalla de Televisa. No aparecía para nada, solamente Televisión Azteca, esa sí transmitía un programa “La hora de la verdad”, pero Televisa calló como momia, no decía nada.
Entonces, llegó la elección del 2012 y otra vez, pero ahora Televisa diseñó, fabricó a un candidato y lo sentó en la Presidencia de la República y hasta esposa le consiguieron y otra vez, volver a empezar, plaza por plaza, pueblo por pueblo.
Primero, a defender la mal llamada o a luchar en contra de la mal llamada reforma educativa, a defender la educación pública, laica y gratuita. Después, la defensa energética, la defensa de nuestro petróleo, de la electricidad.
¿Se acuerdan cómo decían que había un tesoro enterrado en el fondo del mar y que lo iban a sacar para que México fuera rico y creciera y que entonces iban a bajar el gas, las gasolinas, las tarifas eléctricas? Fue pura mentira.
Antes de que se votara la mal llamada reforma energética, el destino quiso que a Andrés Manuel López Obrador le diera un infarto y otra vez, Televisa, los señores del dinero se frotaban las manos, se relamían los bigotes y decían: no, ya ese corazón ya se cansó, ya no va a seguir. Ahora somos nosotros, se acabó el movimiento.
Pues, ¿saben qué sucedió? Yo lo leí en la Biblia algo parecido. Estuvo 20 días en el hospital, en reposo y al día 21, como Lázaro se levantó y se puso a caminar junto con todos ustedes y ahora sí, a fundar Morena y después fue imparable el apoyo del pueblo.
Ustedes, más de 30 millones de mexicanos llevaron a Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República y ahora sí. ¿Qué fue lo primero que hizo Andrés Manuel ya en la Presidencia?
Tomó posesión el día primero, el día 3 de diciembre mandó una iniciativa para que se hiciera realidad aquel sueño, la pensión universal para los adultos mayores del país.
Dos meses después, en enero y febrero, por las casas de todos ustedes, fueron los servidores de la nación, con su chaleco guinda, preguntando casa por casa, preguntando cuántos adultos mayores vivían en cada casa. ¿Quiénes eran? Cuántos eran y cómo se llamaban, ese era el objetivo.
Porque en marzo y en abril de ese año, en las plazas públicas, en las bibliotecas, en las escuelas, en los parques, en las oficinas de Telégrafos, por primera vez en la historia de este país alguien hacía justicia y cumplía su palabra con los adultos mayores y los adultos mayores empezaron a recibir su pensión universal. Ese es un presidente que cumple.
Miren, tan les reconoce a los adultos mayores, que cuando la epidemia de COVID, el presidente instruyó para que se les pagara por adelantado un año de pensión universal para que, mientras estaban en su casa en resguardo, no les faltara nada a los adultos mayores de México.
Y ahora, como ya vienen los tiempos electorales, ya empezaron Televisa y los que se sentían los dueños del país de México, ya empezaron otra vez a querer sembrar la confusión.
Andan diciendo, como ahora ya se va a terminar el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, ya se va a ir y una vez que se vaya va a desaparecer la pensión universal para adultos mayores.
Pues, aquí les digo, les platico lo que el presidente respondió el primero de julio en el Zócalo, el festejo de los cinco años del histórico triunfo del pueblo de México. Dijo y escúchenlo bien: “Venga quien venga, la pensión universal para los adultos mayores se queda, porque es un derecho y es una obligación constitucional”.
Y a todos los adultos mayores que hoy nos acompañan y a sus nietos y a sus hijos les digo una buena noticia. ¿De cuánto es la pensión universal? ¿Cuánto recibe? Cuatro mil 800 pesos. Pues, a partir de enero, a partir de enero del próximo año, la pensión universal sube 25 por ciento, va a ser de seis mil pesos. Como decimos en mi pueblo: tengan para que aprendan. Hay un presidente que cumple.
Y bueno, como ya estamos en cosas electorales, yo aprovecho para decirles, ahí andan otra vez los de Televisa, a mí no me sacan en sus entrevistas, en sus noticieros, en sus programas. Me vale un cacahuate, no me importa.
A mí no me interesa salir en las pantallas de Televisa. ¿Saben qué es lo que me interesa a mí? Lo que verdaderamente me importa es entrevistarme con ustedes. Eso es lo más valioso, entrevistarnos con el pueblo.
Así, que aquí se los digo, vamos a seguir casa por casa y nos vamos a seguir organizando. A mí, ya hasta me mandaron a un amigo que me dijo: “Oye, vengo de emisario”. “Emisario ¿de quién?” “De los señores dueños de Televisa”, me dice. “Ah, ¿qué quieren?”.
“Pues, quieren que te vayas a tomar un café, que platiquen para que se solucione el problema y aparezcas en las entrevistas y en los noticieros”. Le dije: “N, con ellos, ni siquiera un vasito con agua”.
A mí no me interesa Televisa, si nos organizamos, si este pueblo se organiza, no nos gana Televisa. Ya les ganamos y les vamos a volver a ganar.
Nunca me verán en las pantallas de Televisa. Pueden venir 50 seguidos aquí al Lienzo Charro en Jilotepec, pero allá, con aquellos nada, porque los principios, a los principios no se renuncia. Los principios son primero y ustedes, primero, son los que nos importan.
Andan otros, los de Latinus, esos también, esos son gobernadores, exgobernadores, yernos de exgobernadores, políticos del pasado que ya contrataron a un mercenario de periodismo. Estaban acostumbrados a lucrar a costa de la salud de los mexicanos.
Tenían multimillonarios contratos de salud, por todo el país. Aquí en el Estado de México tenían un contrato de más de cinco mil millones de pesos y ¿saben a qué se dedicaban? A vender medicamentos, material de curación y les voy a dar un ejemplo.
¿Cuánto cuesta una cajita de paracetamol aquí? 28 pesos, 30, 40, 15. Bueno, entre 15 si es genérica y 40 pesos si es de farmacia normal. ¿Saben a cómo se la vendían estos al gobierno del Estado de México, al gobierno de Del Mazo? 784 pesos. ¿Eso no es un robo? ¿Es un robo?
Lo bueno es que ya viene Delfina y es una mujer honesta, trabajadora y se va a acabar sus contratos. Ya esos también me mandaron a decir que cuándo voy a los estudios, a las oficinas de Latinus para que me hagan una entrevista muy cuidada. Les digo: “No, cómo crees que voy a ir. El día que yo llegue con Latinus, me van a dejar hasta sin la cartera”.
No, tampoco nosotros con ustedes; con ellos, nada. No me interesa tampoco una entrevista con ellos, ni siquiera una entrevista bien cuidada o muy cuidada.
Yo me entrevisto con ustedes y hablamos y me dicen los problemas de la zona norte y que hay problemas de falta de agua, agua para riego, agua para consumo humano, que hay mucha politiquería, incluso en el reparto del agua, todo eso va a terminar.
Como también se los digo, la región norte no tanto, pero en todo el Estado de México hay mucha violencia intrafamiliar y hay mucho feminicidio y yo sé que Delfina va a estar a la altura de las circunstancias. Nunca más una mujer violentada en el Estado de México, no más feminicidios en el Estado de México.
Vamos a apoyar todos a Delfina, tiene que haber un programa de prevención con perspectiva de género. Tiene que haber mucha difusión.
Tenemos, entre todos, que cambiar esa triste dinámica. Delfina sabe cómo hacerlo y lo va a hacer bien, porque tiene el apoyo de todas y todos ustedes y de una vez, yo creo que es el momento de darle un impulso al apoyo a las mujeres, a las mujeres trabajadoras, a las artesanas.
Así como hay un programa social para los adultos mayores, tiene que haber programa social que apoye a las mujeres del Estado de México y de todo el país.
Y aprovecho para platicarles, ahora nuestro partido nos nombró delegados nacionales en Defensa de la Cuarta Transformación y nos pidió que recorriéramos todo el país en asambleas como estas y puso a nuestra disposición cinco millones de pesos para que los usáramos para viáticos, para transporte, para el hotel, para la comida.
Miren, ¿saben hasta qué puede uno pagar con ese dinero? Hasta el gel que usamos para matar al bicho. Pero, yo decidí con todo respeto y se los quiero decir, no aceptar ese dinero. No aceptar recursos públicos para beneficios personales o políticos.
Y le he pedido a mi partido que ese dinero se destine a la construcción, reconstrucción, remodelación, ampliación y equipamiento de dos Centros de Salud en las comunidades más apartadas y más olvidadas de México y así va a ser, vamos a apoyar con todo.
Y si sobra recurso, que yo creo que va a sobrar, vamos a pedir que incluyan dos comunidades más, dos municipios de los más olvidados de este país, porque nosotros no necesitamos de recursos públicos para estar al lado de ustedes, para estar conversando con ustedes, para estar escuchando las necesidades de ustedes.
Y después, se los digo: yo recorrí todo el país, acompañando a Andrés Manuel López Obrador. ¿Qué es mi paisano? Sí. ¿Qué es mi amigo? Sí. ¿Qué es mi hermano? Sí.
Cuando tomé posesión como secretario de Gobernación, él lo dijo: Adán Augusto es mi hermano, pero para mí, lo más importante ¿saben qué es? Que yo todo lo que soy, lo he sido en política, lo poco o mucho que pueda saber y el compromiso social que tengo, se lo aprendí, me lo enseñó Andrés Manuel López Obrador y él es mi maestro y nosotros reconocemos admiramos y nunca le vamos a fallar a nuestro maestro.
Él nos enseñó que había que recorrer incansablemente el país y que solamente se necesitaban tres elementos, tres letras: suela de los zapatos, sudor en la frente y saliva, que representa la palabra que se empeña, que se compromete, pero que se va a cumplir cuando seamos gobierno.
Miren ¿saben ustedes cuál es mi convicción? Muchos de ustedes acompañaron durante años a Andrés Manuel López Obrador. Eran reuniones hasta debajo de los árboles y ¿cuándo escucharon ustedes que Andrés López Obrador pidiera dinero para viáticos? Nunca, no los necesitamos.
Y ¿saben por qué no lo necesitamos? Porque, eran jornadas interminables, empezamos seis, siete de la mañana y terminaban seis, siete de la tarde, y nunca faltaba el compañero, la compañera que lo invitara a su casa y ahí le invitara un vasito con agua, un platito de arroz, frijoles, si se podía, un caldito de algo.
Cuando era allá en la región de la costa, pues a veces había hasta un pescadito frito, pero nunca faltó, nunca faltó, porque eso es lo grandioso del pueblo de México. El pueblo de México es un pueblo bondadoso, noble, generoso, compartido.
Aquí en México, a ningún mexicano le hace falta un plato de arrocito, algo de comer, una medicina, un remedio. Eso es lo más bello de los mexicanos, no hay un pueblo en el mundo que sea tan noble y tan generoso como el pueblo de México.
Y entonces, nosotros que estamos comprometidos a guardar lealtad al pueblo de México, a ustedes. Entonces, es con ustedes, no necesitamos de los recursos públicos y también les digo una cosa: claro que todavía hay algunos pendientes.
Este es el gobierno de la transformación, de lo que soñó el pueblo durante décadas y no había sido posible convertirlo en realidad. Nunca nadie había pensado en programas sociales, en becas para los jóvenes, en Sembrando Vida, en apoyo para las mujeres, en vivienda para todos, en pensión universal para los adultos mayores.
Pero, nos falta algo, porque este país necesita que haya justicia. Por eso, el año próximo se va a transformar, se va a reformar la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Poder Judicial.
Miren, este país está tan lleno de injusticia que aquí hay varios agricultores de Jilotepec y de toda esta zona norte del Estado de México. Díganme ustedes ¿cuándo han escuchado que un agricultor, que un ejidatario, que un campesino le gane un juicio en defensa de la tierra a un potentado, a un rico? Nunca.
Yo, a todos lados donde voy y seguramente aquí, me va a abordar alguno y me va a platicar un caso, 10, 20, 30 años esperando a que llegue la justicia y esa nunca llega.
Una maestra, a la que yo admiro, quiero y respeto mucho, me enseñó, me dio a conocer una frase que es verdaderamente hermosa. Me dijo “Adán Augusto, aquí en México, la injusticia es como la serpiente, solo muerde al que está descalzo, al pobre, al oprimido, al necesitado”.
¿Hay aquí algunos maestros? Maestros jubilados. Se los platico, porque los tenemos que ayudar. Miren, los maestros jubilados cobran una pensión, que debiera de ser una pensión justa, pero se les ocurrió que tenía que ser en algo que le llaman UMAS. Ni ellos ni yo sabemos qué significa eso. Lo cierto es que, cada día se empobrece más su pensión.
Están recibiendo cada año, menos dinero, a tal grado que, ya ni se quieren jubilar los maestros. ¿Saben ustedes quién cometió esa injusticia, quién cambio que en lugar de salarios mínimos fueran esos maldecidos UMAS, me dijo un maestro ayer? Pues, los ministros de la Corte, la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Mientras que ellos ganan más de 600 mil pesos mensuales, quieren que los maestros sigan empobreciéndose, pero eso se va a terminar, porque en este país, va a haber justicia y va a haber justicia para el pueblo y va a haber una Suprema Corte que va a ser justa, porque eso es quizá, lo más importante de la Cuarta Transformación.
¿Saben qué es lo más hermoso? ¿Lo más bello y lo más importante de la Cuarta Transformación? Es la revolución de las conciencias. La revolución de las conciencias, cuando se distingue entre lo bueno y lo malo. Los buenos y los malos y ustedes y yo sabemos que siempre el bien triunfa sobre el mal. Esa es la revolución de las conciencias.
Eso es lo que Andrés Manuel López Obrador ha venido construyendo con ustedes. Hoy la revolución de las conciencias es aceptar que el pueblo manda, que ustedes mandan, que ustedes deciden y ustedes ya decidieron.
Va a continuar la Cuarta Transformación de la Vida Pública Nacional.
Muchas gracias a todas y a todos.
¡Que viva Jilotepec!
¡Que viva el generoso y trabajador pueblo del Estado de México!
¡Que viva el Estado de México!
¡Que viva México!
¡Que viva Andrés Manuel López Obrador!
Muchas gracias.
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