Muy buenas tardes tengan todas y todos ustedes.
Muy buenas tardes, Ocosingo.
Muchas gracias por acompañarnos esta tarde y yo les agradezco todavía mucho más, que a pesar de la lluvia que cayó torrencialmente, ustedes estén aquí acompañándonos.
Muchas gracias, de verdad. Eso, su compañía, su participación, su apoyo, eso no tiene precio.
Muchas gracias a quienes vienen de Yajalón, de Tumbalá, de aquí, de Ocosingo, de Sabanilla, de Altamirano, de Chilón, Oxchuc, Tabasco. Muchas gracias, de verdad a todas y a todos ustedes.
Lo dije en San Cristóbal y lo digo aquí también: este día no lo voy a olvidar nunca. Lo voy a convertir “en las horas para siempre”. Muchas gracias, de verdad.
Yo he estado muchas veces aquí en Ocosingo, todas, pero todas, acompañando al hoy presidente de la República. Desde el 2005 que comenzamos a acompañarlo a su recorrido por todo el país, Chiapas y Ocosingo, siempre estuvieron presentes.
Miren, mi última visita como secretario de Gobernación a un estado fue precisamente aquí en Chiapas. Estuvimos en Comitán y ahí, con todo sentimiento dije que era mi última salida representando al presidente de la República y que yo había siempre soñado con que fuera en Chiapas, porque era reconocer el noble, al trabajador, al comprometido pueblo chiapaneco.
Y estar aquí con ustedes es reconocer que ha iniciado ya la cuarta transformación, en Chiapas y en todo el país.
El que ahora existan programas sociales, desde luego que era un compromiso, nada más aquí en Chiapas, 377 mil adultos mayores reciben hoy ya una pensión y más de 650 mil estudiantes, niños, reciben su beca Benito Juárez.
El gobierno federal, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador destina en programas sociales, más de 18 mil millones de pesos al año, pero ese dinero todavía no es suficiente.
¿Por qué? Porque nosotros queremos que Chiapas, que ustedes que han sufrido marginación, abandono, pobreza, carencias, lo peor, imagínense ustedes, de los malos gobiernos, lo ha recibido Chiapas. Ustedes no merecen ese abandono. No merecen esa desidia gubernamental, esa marginación.
Por eso, yo les digo, Chiapas es grande y va a salir adelante, porque nuestra prioridad es el respeto y el reconocimiento a su cultura, a sus tradiciones.
Nunca más un conflicto territorial en Chiapas. Nunca más un desplazado. Ese es nuestro reto y lo vamos a conseguir entre todos.
Y tengan la seguridad que nosotros vamos a anteponer a Chiapas y a su pueblo, que el noble pueblo chiapaneco ya no sufra ni por falta de servicios de salud, ni por hambre, que haya siempre un plato de comida para la mesa de sus familias. Ese es nuestro compromiso.
Hoy, quiero aprovechar para agradecer aquí a los adultos mayores que nos acompañan, porque los adultos mayores son la esencia, son la base de este movimiento.
Sin ustedes, que acompañaron durante tantos años y apoyaron a Andrés Manuel López Obrador posiblemente hubiese sido más difícil o a lo mejor, hasta imposible que llegara a la Presidencia de la República.
Porque, cuando le robaron la elección en el 2006 Televisa, los dueños del dinero a Andrés Manuel López Obrador, ustedes, ustedes los adultos mayores y desde luego, los chiapanecos también.
Después, cuando se fue a recorrer todo el país, plaza por plaza, pueblo por pueblo, ustedes estuvieron solidarios y acompañándolo.
Y después, llegó el 2012 y entonces, otra vez, la televisora Televisa y los mismos de siempre, los que nunca han querido al pueblo, diseñaron, fabricaron a un candidato y lo sentaron en la Presidencia de la República y otra vez, volver a comenzar, volver a recorrer todo el país y comprometerse con ustedes, pero apoyado por ustedes.
Finalmente, después de tanta noche oscura, llegó el 2018 y ahí ya, el movimiento popular ya no lo detenía nadie. Ni pudieron con el fraude electoral. No hubo nada que se opusiera al reconocimiento de la gente y del apoyo de la gente.
Más de 30 millones de mexicanos hicieron presidente de la República a Andrés Manuel López Obrador y una vez que tomó posesión había que cumplirle al pueblo y había que cumplirle a los adultos mayores.
Porque en este país, hasta esa fecha, nunca un agricultor, un campesino, un ejidatario, un ama de casa, un obrero, un plomero, un albañil, un peón de albañil, un barrendero, un chofer de taxi, un bolero, un zapatero, no tenía derecho a una jubilación, a una pensión digna.
Por eso, en diciembre de ese año, del 2018, el presidente mandó una iniciativa al Congreso de la Unión para que se hiciera realidad la pensión universal para los adultos mayores en este país.
Entonces, inició en enero y febrero, los servidores de la nación se dedicaron a elaborar un censo; a ir a todas las casas, porque requeríamos saber cuántos eran, dónde estaban y quiénes eran los adultos mayores de este país.
En abril, a finales de marzo y principios de abril, llegó el momento más hermoso, el de cumplir la palabra y en todas las plazas, en las bibliotecas, en las librerías, en las escuelas, en las oficinas de Telégrafos, finalmente, los adultos mayores de este país comenzaron a recibir su pensión universal.
Eso es querer al pueblo y cumplirle al pueblo. Ese es el tamaño del amor que el presidente le tiene al pueblo de México y a los adultos mayores.
Él nunca va a olvidar la generosidad, la entrega, el compromiso, el amor de todos ustedes, por eso dice: amor con amor se paga.
Amor con amor se paga y no hay nada más valioso que el amor al pueblo, como decía un paisano de ustedes, Jaime Sabines, decía: “el amor no se puede callar, ni con palabras, ni con callar. El amor se dice con nada”. Amor, el que el presidente de la República le ha demostrado, le tiene al pueblo de México.
Por eso, ahora que ya se acerca el tiempo electoral, ya andan diciendo, esos que no quieren al pueblo, que nunca han querido a este movimiento, que hicieron todo para que Andrés Manuel López Obrador no llegara a la presidencia, que hicieron e intentaron todo para que nunca se diera la transformación de la vida pública del país, ahora andan diciendo, a los pocos que los escuchan, pero lo andan diciendo, que ahora que se vaya el presidente Andrés Manuel López Obrador de la Presidencia, se va a terminar con la pensión universal para los adultos mayores.
Eso es una mentira. Ya el presidente lo dijo ahora en el Zócalo, el primero de julio, cuando fuimos a acompañarlo, al festejo del histórico triunfo. Escúchenlo bien, díganselo a los amigos, a los vecinos, que lo sepa todo mundo, dijo: “Venga quien venga, la pensión universal de los adultos mayores se queda, porque es una obligación y es un derecho constitucional”.
Pero ahí siguen, a ver si adivinan, hay otro, una chachalaca grandota de Guanajuato. Le fue a decir a su candidata y lo hizo público, que quería que regresara la pensión a los expresidentes de la República y que desaparezcan todos los programas sociales, incluido el de los adultos mayores, también el de los Jóvenes, el de las Becas Benito Juárez, el Sembrando Vida, apoyo a las personas con discapacidad, el apoyo a las madres solteras, a los hijos de las madres solteras.
Dijo: que desaparezcan todos los programas sociales, porque quienes los reciben “son unos…”, yo no lo voy a repetir, porque ustedes, el pueblo que es el que recibe los programas sociales son un pueblo noble, trabajador, dedicado, comprometido. El zángano, el mentiroso, el vividor es él, Vicente Fox, no el pueblo.
Por eso aquí en Ocosingo vamos a aprovechar para hacer una encuesta, nada más que, sí les aviso que esta encuesta no va a salir en ningún periódico, El Universal, Reforma, el otro, El Financiero, mucho menos en Televisa, porque esos nada más publican los que les pagan.
Las encuestas que publican ellos son encuestas anímicas, porque lo que buscan es levantar el ánimo para que se la crea el que o la que las paga. Pecan por la paga.
Aquí lo que cuenta es lo que la gente decida, el pueblo decida y a ver, yo les pregunto: ¿Ustedes están de acuerdo con que regrese la pensión a los expresidentes de la República? No. No se escucha.
Segunda pregunta: ¿Ustedes quieren que continúen todos los programas sociales, incluyendo el de la pensión universal para los adultos mayores? Sí. Dicen que no se escucha hasta Guanajuato: Sí. Ahí está, ya ustedes decidieron. El pueblo manda.
Y como el pueblo manda, pues ahora yo les voy a dar una noticia.
A ver, ¿de cuánto es la pensión universal hoy? ¿Cuánto reciben? Cuatro mil 800 pesos.
¿Cómo se llama usted que viene de Sabanilla? De Ocosingo ¿cómo se llama? De muchos años de lucha.
Guillermina: Guillermina.
Lic. Adán Augusto López Hernández: Doña Guillermina ¿de cuánto es la pensión que recibe?
Guillermina: Cuatro mil 800.
Lic. Adán Augusto López Hernández: Cuatro mil ochocientos.
Siéntese por favor, no se vaya a caer de la emoción, a partir de enero del próximo año, la pensión universal aumenta 25 por ciento, va a ser de seis mil pesos.
Que lo escuche Fox y los otros: tengan para que aprendan. Ya lo vieron por qué les decía: amor con amor se paga.
Ahora que venía aquí, me dieron una nota, la estaba leyendo, dice la nota: “Creemos en el presidente, Andrés Manuel López Obrador y lo vamos a querer toda la vida. Nunca vamos a olvidar lo que hace por el pueblo de México”. Atentamente, doña Francisca Reyes de Sabanilla. Ese es el mensaje del pueblo al presidente.
Por eso ahora, nosotros, pues estamos comprometidos a seguir trabajando con ustedes, trabajando con el pueblo, construyendo entre todos la continuidad de la Cuarta Transformación de la Vida Pública Nacional.
Ya les platiqué cómo, durante muchos años Televisa escondió a Andrés Manuel López Obrador. No lo mencionaba para nada, no salía ni en las entrevistas, ni en las noticias, porque para ellos, para Televisa, pues se sentían los dueños de México, ellos y los señores del dinero, no querían que el líder político popular más importante, cuando menos desde la época de Lázaro Cárdenas en este país, llegara a la presidencia de la República; hicieron todo para que no llegara, incluso, como les digo, desaparecerlo de las pantallas de Televisa.
Ahora, yo no sé cuál será el temor, porque conmigo ya están haciendo lo mismo. Yo no salgo en las noticias de Televisa, en sus noticieros, en sus entrevistas. Nada. Pero, aquí se los digo en Ocosingo: a mí, Televisa me vale un soberano cacahuate. No me interesa Televisa.
A mí, lo que verdaderamente me importa, lo que verdaderamente me interesa es entrevistarme con ustedes. Eso es lo más importante, porque ustedes mandan. El pueblo de México es sabio.
Miren, yo he conocido todo el país y al pueblo de México, acompañando a Andrés Manuel López Obrador durante muchos años por todo el país. Desde luego lo acompañamos también a fundar Morena, porque yo soy orgullosamente fundador y militante de Morena.
Porque ahora que ya somos delegados nacionales el partido puso a nuestra disposición cinco millones de pesos. Nada más que aquí les informo, yo acepté.
Los rechacé y he pedido que ese dinero se destine a la construcción, remodelación, ampliación, equipamiento de cinco Centros de Salud en las comunidades más marginadas de México, para eso tienen que usarse los recursos públicos.
Yo nunca, yo no sé ustedes ¿alguna vez escucharon que Andrés Manuel López Obrador pidiera dinero para viáticos? Nunca.
Nunca faltó al terminar la jornada, que era larga, nunca faltó el compañero o la compañera que lo invitara a su casa. Ahí siempre, había, por muy modesta que fuera un vasito con agua, un plato de frijol, un poco de arroz y hasta una tlayudita una tortillita, siempre hubo.
Porque eso no se compra ni con todo el dinero del mundo. Eso es lo más hermoso del pueblo mexicano, su bondad, su generosidad, su solidaridad. Eso no lo tiene ningún pueblo del mundo.
Aquí en México, en Ocosingo, en Sabanilla, en Chilón, en Oxchuc, en todos los rincones del país, cuando sabemos que un compañero o una compañera está pasando hambre porque no tiene para la comida en su casa, siempre vamos y lo compartimos de nuestro plato o lo invitamos a nuestra mesa.
Esa es la bondad del pueblo de México y esa no la tiene nadie, ningún pueblo del mundo, ni los rusos, ni los chinos, ni los alemanes, ni los ingleses, ni Obama me dijeron hace un rato en San Cristóbal; ni los americanos, por supuesto. Eso, solo el pueblo de México.
Por eso, nosotros le debemos al pueblo mucha lealtad, porque esa es la única que vale. Lealtad significa seguir apoyando al presidente Andrés Manuel López Obrador en el último tramo de su camino.
Lealtad significa que vayamos todos juntos para que continúe la Cuarta Transformación de la Vida Pública Nacional y haya relevo generacional y seguimos fortaleciendo las políticas del presidente Andrés Manuel López Obrador. Esa es la lealtad.
Por eso, aprovecho para decirles que el año próximo se va a renovar, va a cambiar el Poder Judicial de la Federación y la Suprema Corte de Justicia de la Nación, porque en este país tiene que haber justicia.
El día de hoy, hasta el día de hoy, en México se vende al mejor postor, al que tiene para pagarla. ¿Cuándo han visto ustedes aquí, en Ocosingo, en Sabanilla, en Oxchuc, en Chilón, en Yajalón que un agricultor, un campesino, un ejidatario le gane un juicio a un rico, a un potentado cuando está defendiendo su tierra? Nunca.
México está plagado de injusticia. Me decía, eso se lo aprendí a una maestra a la que yo admiro, quiero, respeto, escucho mucho, me aconseja, me dijo: “Adán Augusto, en México, la injusticia es como la serpiente, solo muerde a los que están descalzos, a los que no tienen ni para un par de huaraches, a los pobres, a los oprimidos, a los marginados de siempre”. Eso es lo que vamos a cambiar.
Lo vamos a cambiar, porque ustedes tienen la decisión en sus manos. El año próximo hay que participar para que todo ese cambio sea posible y para que se termine en nuestro país con tanta injusticia.
Miren, no es posible y se los digo ahora, que una jueza pretenda detener la entrega de los libros de texto gratuitos. Los libros de texto gratuitos son parte esencial de la educación de los mexicanos.
Ningún juez, ningún magistrado, ningún ministro de la Corte tiene derecho a torpedear el proyecto educativo que ustedes, más de 30 millones de mexicanos decidieron y apoyaron. No pasarán ni los jueces, ni los magistrados, ni los ministros.
Vamos a seguir apoyando porque la educación merece de toda nuestra dedicación, de toda nuestra entrega y aunque les duela, va a haber proyecto educativo y va a haber libros de texto para siempre.
Miren, termino diciéndoles, ya hablamos de los programas sociales, de los libros de texto, ya hablamos de un proyecto educativo, progresista, que piensa en la formación de nuestras niñas, de nuestros niños.
Todo eso es fundamental, pero lo más importante de todo, lo más hermoso de todo este proyecto de transformación que ustedes, el pueblo de México y Andrés Manuel López Obrador han construido, es la revolución de las conciencias. Esa es irreversible, no la va a detener nadie.
¿Saben qué significa la revolución de las conciencias? Significa, esto también me lo enseñó mi maestra, significa: saber distinguir entre lo bueno y lo malo. Entre los buenos y los malos y que no se nos olvide nunca, que el bien siempre triunfa por encima del mal”.
Hoy, somos más, muchos más, más de 30 millones de mexicanos.
Nosotros somos los buenos. El pueblo bueno y el pueblo es el que manda. El pueblo bueno es el que ha hecho posible que se construyera la esperanza y que esta hermosa esperanza siga siendo la más bella de las realidades.
Con el pueblo todo, sin el pueblo nada.
Muchas gracias a todas y a todos ustedes.
¡Que viva Ocosingo!
¡Que viva Sabanilla!
¡Que viva Oxchuc!
¡Que viva Chenalhó!
¡Que viva Yajalón!
¡Que vivan todos los pueblos de Chiapas!
¡Que viva Chiapas!
¡Que viva México!
¡Que viva Andrés Manuel López Obrador!
Muchas gracias a todas y a todos ustedes.
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