Muy buenas tardes a todas y a todos ustedes.
Yo le agradezco la espera, aun con el riesgo de lluvia nos acompañen esta tarde y una disculpa que haya llegado con retraso, porque yo respeto mucho el tiempo de ustedes, el tiempo que dedican a acompañarnos.
Quiero, de manera especial, agradecer la presencia de los adultos mayores que nos acompañan esta tarde.
Muchas gracias de verdad, a todos y a cada uno de ustedes por tomarse la molestia, tomarse el tiempo de venir a acompañarnos. Eso, su presencia nos anima, nos fortalece, nos obliga a seguir hacia adelante sin descanso, sin parpadeo.
No podemos regatearles nada a los adultos mayores y mucho menos dejar de reconocerles su participación, su entrega, su apoyo.
Sin los adultos mayores, este movimiento posiblemente no hubiera triunfado.
Sin los adultos mayores difícilmente Andrés Manuel López Obrador hubiera llegado a la Presidencia de la República. Sin ustedes, a lo mejor no habría Cuarta Transformación de la Vida Pública Nacional.
Ustedes, en los momentos difíciles estuvieron apoyando, confortando, animando a Andrés Manuel López Obrador.
Cuando le robaron en el 2006 la Presidencia de la República, los mismos de siempre, Televisa, los señores del dinero, los conservadores, impusieron a un espurio, a Felipe Calderón y ahí estuvieron ustedes, animando, acompañando a Andrés Manuel López Obrador para ir cada día fortaleciendo este movimiento, que algún día habría de transformar a México.
Después, cuando en el 2012, otra vez, los mismos de siempre, Televisa, los señores del dinero, los conservadores, los que decían a los cuatro vientos que Andrés Manuel era un peligro para México, los que nunca han querido al pueblo de México diseñaron, fabricaron a un candidato y lo sentaron en la Presidencia de la República.
Así actúan los conservadores, los reaccionarios, los que no quieren a México. Otra vez, volver a empezar y ustedes ahí, acompañando junto a Andrés Manuel López Obrador, fortaleciendo el movimiento, porque finalmente, en julio del 2018 ya era imparable la ola popular, el apoyo del pueblo ya rebasó cualquier expectativa, más de 30 millones de mexicanos, ustedes hicieron presidente a Andrés Manuel López Obrador.
Cuando tomó posesión de la Presidencia, lo primero que hizo fue mandar una iniciativa de ley para reconocer a nuestros adultos mayores, para que todos los adultos mayores del país tuvieran derecho a una jubilación, a una pensión digna.
En enero y febrero, los servidores de la nación, por todo el país levantado un censo, porque requeríamos saber cuántos eran, dónde estaban y quiénes eran los adultos mayores.
Finales de marzo, principios de abril llegó el momento esperado. Lo que imaginamos millones de mexicanos que finalmente, un obrero, un carpintero, un paletero, un afanador, un bolero, un zapatero, un dulcero, un vendedor ambulante, un taxista, un chofer, un ama de casa tuvieran derecho a una jubilación digna, lo nunca visto en la historia de México sucedió con Andrés Manuel López Obrador.
Y ahora, aprovecho que estoy aquí en Atizapán para decirles, ya empezaron, ya son los tiempos electorales, ya empezaron otra vez, los conservadores, los mismos de siempre Televisa, todos los que no quieren a México.
Andan diciendo ahora que ya se va Andrés Manuel de la Presidencia, se va a acabar la pensión universal para los adultos mayores. Ya lo dijo el presidente en el Zócalo el primero de julio: “Venga quien venga, la pensión universal se queda porque es un derecho de ustedes y es una obligación constitucional”, pero ahí siguen.
Ya salió otro, aquí en Atizapán no le voy a decir que es una chachalaca, porque se ofende, se llama Vicente Fox. Anda diciendo, le dijo a su candidata que quiere que regrese la pensión para los expresidentes de la República.
Y que desaparezcan los programas sociales y la pensión universal, porque dice él que todos los que reciben esos programas “son unos…”, yo no lo voy a repetir, porque es faltarles el respeto a ustedes.
El zángano, el flojo, el mantenido, el vividor es él. Ustedes son un pueblo trabajador que ha dado su vida para engrandecer a México.
Y bueno, pues aprovecho y les propongo que hagamos una encuesta. ¿Qué les parece? Eso sí, que se sepa bien que esta encuesta no va a salir publicada ni en El Universal, ni en el Reforma, ni en El Economista, ni en El Financiero, mucho menos en Latinus, ni esperen que, en Televisa, ahí nada más se publican por la paga. Se llaman encuestas anímicas, porque para lo único que sirven esas encuestas es para levantarle el ánimo a las que las paga o al que las paga para que lo pongan ahí arriba.
Así ha engañado al pueblo de México, nada más que acá con nosotros, con este movimiento, la única encuesta válida es lo que ustedes decidan. Nosotros no vamos a caer en el juego de aquellos. Los combatimos tantos años como para que ahora, nosotros nos convirtamos en eso que tanto combatimos, que se queden esos con sus encuestas. Aquí, responde el pueblo y el pueblo manda.
A ver, primera pregunta. ¿Ustedes quieren que regrese la pensión a los expresidentes de la República? No. Pues, ya se amoló Fox, va a tener que buscar trabajo, quería su cocol. Va a vender gelatinas ahora.
A ver, segunda pregunta y más importante. ¿Ustedes quieren que continúen los programas sociales y que permanezca la pensión universal para los adultos mayores y tratemos de bajarla de 65 a 63 años? Sí. No se escucha. Sí.
Pues, larga vida a la pensión universal y a los programas sociales, llegaron para quedarse, porque ustedes así lo decidieron.
Miren, todo lo que estamos viendo ahora es una estrategia perversa, es politiquería de los conservadores y de Televisa y de los otros medios de desinformación.
Fíjense, ustedes lo saben y ahora lo hemos comentado, que durante años que Televisa desapareció de las pantallas a Andrés Manuel López Obrador, solamente lo mencionaban para decir que era un peligro para México.
Yo no sé, bueno, yo sí sé, porque ya son tiempos electorales, pero ¿cuál será su miedo, su temor? A mí ya no me sacan en sus programas de Televisión, en sus programas especiales, noticieros, entrevistas. No me importa.
Miren, cuando era yo secretario de Gobernación, en la mañana me tocó cubrir al presidente que se enfermó de COVID cuatro días y yo encabezaba la conferencia mañanera.
En la noche, por curiosidad prendía yo la televisión a ver qué decían. Decían: “El gobierno de México informó…”, nada más, no decían quién había informado, mucho menos una imagen, pero yo aquí aprovecho en Atizapán, porque se los quiero decir de frente, a mí Televisa me vale un reverendo cacahuate. No les tememos, ya los derrotamos y los vamos a volver a derrotar.
Miren, hace unos días, me fue a ver a Poza Rica un amigo, un compañero del movimiento, que por aquí anda, ya se me peló con todo y Libro de Texto que le había dejado encargado.
Me dijo: “Oye hermano, vengo de emisario”. Hasta para atrás me hice, porque cuando te dicen eso, pues: “¿Emisario de quién? Si yo no le debo a los bancos, ni a Coppel, ni a Elektra”. Me dice: “No, vengo de emisario de los señores de Televisa”.
Le digo: “Esos ¿qué quieren?”. Me dice: “¿Qué cuándo vas a sus hermosas oficinas, lujosas oficinas y que te invitan un café y que ahí ya platicando con el cafecito se arregla todo y vas a ser una estrella más del Canal de las Estrellas?”. Le digo: “No, primo hermano, si yo soy alérgico al café”. Pero, al café de ellos, al de ustedes no; con ustedes todo, un tinaco de café si quieren, pero con ellos nada.
Nunca, nunca me van a ver en las pantallas de Televisa, ni entrevistas, ni nada. A mí la única entrevista que me importa, que me interesa es con ustedes, entrevistarme con ustedes, por eso estamos hoy aquí en Atizapán, con ustedes todo, con ellos nada.
No pasarán, no nos van a ganar. Ya los derrotamos, tenemos que seguir organizándonos y les vamos a volver a ganar.
Y miren, todo es una estrategia perversa. Es la estrategia de la derecha, de los conservadores. Ahora, como ya ven que nada más no pueden ganarle una al Presidente y al pueblo, ya sacaron otra embestida, que no van a distribuir los Libros de Texto.
Ahí hay una gobernadora conservadora en extremo, reaccionaria, politiquera, como dice el presidente, que disque promovió un amparo, está como decimos en Tabasco, a ver si le entienden: está amacollada. ¿Saben qué significa amacollada? Está enchufadita, pues, con los jueces y los ministros de la Corte, eso es amacollada, pura maniobra politiquera.
Imagínense que no van a distribuir los libros de texto porque quieren que los niños de la Sierra Tarahumara, en Chihuahua, estén en la ignorancia, y la de Aguascalientes está peor, ni siquiera sabían que existe una comunidad huichol allá en su estado. Eso es ahora, es una embestida.
Saben qué andan diciendo otra vez Televisa, los nietos de aquellos conservadores que fueron a buscar al príncipe europeo para hacerlo monarca, emperador de México, Maximiliano de Habsburgo. Andan diciendo que los libros de texto gratuitos nada más les enseñan comunismo a los niños, que si los leen los niños van a aprender a comer santo.
Miren, el pueblo que no conoce su historia, que no sabe de dónde viene, dice el Presidente, no sabe para dónde va.
Se volvieron a equivocar, porque el pueblo de México sí conoce la historia de nuestro país, ya lo han construido ustedes. La lucha ha sido larga, conservadores contra quienes quieren al pueblo de México, con quienes soñaron con un país mejor, con un país distinto, un país de igualdad, de respeto a todo.
Eso es el México de hoy y esto es lo que les duele.
Estos querían seguir, quieren seguir teniendo al pueblo con los ojos vendados, pero no van a poder.
Miren, en 1845, en plena batalla entre conservadores y liberales un mexicano de esos grandiosos, Ignacio Ramírez, “El Nigromante”, acababa de salir de la universidad y consiguió un trabajo como maestro en el Instituto Científico y Literario de Toluca; joven, allá fue; se dedicó durante meses, iba a los tendajones, a las tiendas de abarrotes, al mercado, a pedirle a los comerciantes que le regalaran los sobrantes de papel de estraza.
¿Ustedes saben qué es el papel de estraza? El que se usa para envolver el mandado cuando va uno a las compras.
Cuando consideró que ya tenía bastante guardado, y éste es un gesto bellísimo, la única herencia material que él había recibido de su padre era un reloj de oro que se supone había pertenecido a Miguel Hidalgo y Costilla.
Y fue al Callejón de los Gatos en Toluca, con una prestamista, agiotista o como se le llame y llevó el reloj a vender.
¿Saben qué hizo con el dinero de la venta? Compró una imprenta, la instaló en su casa y se puso a imprimir en los pedazos de papel de estraza varios cientos de libros de texto, que se llamaba El Libro Rudimental y Progresivo, y se puso a repartirlo en las escuelas. Este es el antecedente verdadero del Libro de Texto Gratuito.
Ah, pero entonces, como ahora, surgieron otra vez, brincaron los conservadores. ¿Y saben qué hicieron? Mandaron con los gobiernos a decomisar todos estos libros y a quemarlos en la plaza pública. Pero la justicia siempre llega, decían que esos libros iban a terminar con la inocencia de los indios, así decían.
Desalmados había aquella época y hay ahora también, pero llega la justicia, justicia para el pueblo.
Un año después Benito Juárez en la Presidencia de la República rescata ese libro y lo manda a imprimir y lo reparte en todas las escuelas del país, y un grande Benito Juárez.
Cien años después otro grande, Lázaro Cárdenas; cien años después manda a imprimir ese libro, junto con otro que era el Manifiesto Campesino, y lo reparte en todas las escuelas rurales en el país.
Ya no pudieron los conservadores detener la consolidación de la educación pública, laica y gratuita en este país.
¡Ah!, pero ahora ya empezaron, que porque es comunismo tienen que detenerse la distribución; que porque hay mucha ideología de por medio se tiene que detener; que porque ya no enseñan matemáticas se tiene que detener.
Hoy, fíjense, el colmo del absurdo, porque eso es de ahorita, hay una asociación; bueno, asociación delictuosa, que se llama Mexicanos Primero, esos que hasta pagaron una película.
¿Saben qué dijeron hoy? Que esos libros de texto son como el demonio, porque obliga a los maestros a trabajar más. Háganme el favor.
Y yo aquí, en Atizapán, quiero aprovechar para platicarles a ustedes, pero para que todo México se entere, aquí tengo un Libro de Texto, es de Quinto Año, pero todos los libros de los seis años, se los digo a ustedes, tienen una presentación que es lo más hermoso que ustedes van a encontrar en nuestra vida de un libro, en un Libro de Texto.
Esto es, cuando yo termine de leerlo me van a decir si no es un orgullo que nuestros niños; niñas y niños aprendan lo bello de la cultura y la literatura universal.
Miren, estos son los libros de texto que los conservadores quieren censurar y quemar. Dice así: “No sólo de pan vive el hombre, yo si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan, sino que pediría medio pan y un libro, decía el poeta andaluz Federico García Lorca, asesinado por pensar diferente y por desear un mundo mejor para los suyos, para los humildes, para quienes aún conservan un alma pura, solidaria, que no discrimina a las personas por su color de piel, por su género, por sus preferencias sexuales o por no tener un peso en la bolsa. Era un soñador, un idealista, creía que la cultura sería la llave para el cambio, creía en los libros. ¿Tú aún crees en ellos?”
“Estimados lectores, en pocas partes del mundo los libros de texto son gratuitos y llegan a las manos de todas las niñas y los niños. En México se ha luchado porque todas y todos tengan acceso a la cultura. Ahora te toca a ti recibir el fruto de esa lucha”.
Ahora toca a todos nosotros seguir luchando junto al Presidente López Obrador, ganar la embestida a los conservadores y que nuestras niñas, nuestros niños se formen en la diversidad, en la alegría, en la libertad; que aprendan como nosotros a seguir construyendo este gran país que es México.
Vamos a defender a los libros de texto gratuitos con todo, con toda el alma.
Vamos a dejar hasta el tuétano en la defensa de los libros de texto gratuitos.
¡Que vivan los libros de texto gratuitos!
Por eso les digo, costó mucho hacer realidad aquel mensaje, “Por el bien de todos primero los pobres”. Ha costado mucho esfuerzo, compañeras y compañeros se quedaron en el camino, soñando con la esperanza, la esperanza de un México mejor, un México solidario, un México igualitario, un México donde no se discrimine a nadie.
Hoy esa esperanza es una hermosa realidad, gracias a ustedes, gracias al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Miren, se me había pasado y les tengo una buena noticia. Ya hablamos de que la Pensión Universal para los Adultos Mayores se queda, porque es un derecho y una obligación constitucional.
A ver, ¿cómo se llama usted?
Bruno Jiménez Jiménez: Bruno Jiménez Jiménez.
Lic. Adán Augusto López Hernández: Don Bruno Jiménez Jiménez.
A ver, don Bruno, ¿de cuánto es la Pensión Universal que usted recibe hoy?
Bruno Jiménez Jiménez: No sé decirle.
Lic. Adán Augusto López Hernández: El nieto se la queda.
¿De cuánto es?, ¿de cuánto es lo que se lleva su nieto?
A ver, alguien que le ayude a don Bruno.
Intervención: Cuatro mil 800 pesos, le robaron todo su dinero a mi mamá.
Lic. Adán Augusto López Hernández: Cuatro mil 800 pesos, que se los robó Elektra, dice.
Bueno, a ver, don Bruno, siéntese, por favor, porque no se me vaya a caer de la emoción.
A partir del próximo año la Pensión Universal para los Adultos Mayores aumentan 25 por ciento, va a ser seis mil pesos.
¿A poco no ese es amor del bueno? El Presidente y su pueblo, y el pueblo y el Presidente.
Dice un poeta chiapaneco, Jaime Sabines, dice: “El amor no se debe callar, ni con palabras ni con silencios”. Pero ¿saben una cosa? Este amor se presume, porque es amor del bueno. Y no se les olvide, amor con amor se paga.
Por eso vamos a acompañar al Presidente en el último tramo de su gobierno, falta todavía. Pero si ustedes hicieron posible este sueño, entre todos tenemos que conservarlo, porque lo más hermoso de la Cuarta Transformación se llama revolución de las conciencias.
Que haya libros de texto gratuitos, es la revolución de las conciencias.
Miren, una maestra a la que yo quiero, admiro, respeto mucho, es abogada, una gran abogada, me enseñó: “Mira, Adán Augusto, revolución de las conciencias es distinguir entre lo bueno y lo malo, entre los buenos y los malos; y que no es les olvide nunca que el bien siempre triunfa por encima del mal”.
Y yo les tengo una gran noticia, la mejor de las noticias, somos más, muchos más millones de mexicanos que somos el pueblo bueno, y el pueblo manda y el pueblo bueno gana siempre y vamos a seguir ganando y vamos a construir, a consolidar la Cuarta Transformación de la Vida Pública de México.
Muchas gracias a todas y a todos ustedes por acompañarnos esta tarde.
¡Que viva Atizapán!
¡Que vivan las niñas y niños de México!
¡Viva el pueblo del Estado de México!
¡Que viva México!
¡Que viva Andrés Manuel López Obrador!
Muchas gracias.
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